
Sangre azul en un “vis a vis”
¿Alguien podría imaginarse a la hermana del Rey visitando a su marido en un locutorio lleno de colillas, lágrimas y esperanzas? Pues aquí tenemos ya la imagen.
Este proceso nunca me lo he creído.
Quizás deberían compartir ahora un módulo para parejas si el entonces Fiscal no hubiera sido el mejor abogado de la que fuera Infanta, el Tribunal “inusualmente” benevolente con los dos y el Ejecutivo, Fiscal General y Monarquía una gran “piña real”.
De cualquier forma la situación me desagrada enormemente por lo que tiene también de privación de libertad, ruptura de una vida familiar e hijos menores que padecerán doble pena: el escarnio público y la ausencia del progenitor.
Los días y las horas serán igual de eternas (mudas, silenciosas, pegajosas) aunque en tu muñeca luzcas el modelo más caro de reloj o tu pareja llegue con escolta a visitarte (y ese día vistan las sábanas más caras el catre del cuartucho del vis a vis).